30 jun 2010

“Al que no le guste, entonces que cambie la Constitución”




Entrevista a Héctor Recalde
Entre julio y agosto próximo, el diputado nacional por el Frente para la Victoria Héctor Recalde espera tener listo su proyecto de ley para hacer efectivo lo dicho por el artículo 14 bis de la Carta Magna, que le asegura al trabajador la “participación en las ganancias de las empresas, con control de la producción y colaboración en la dirección”. Sabedor de los rivales con los que le tocará medirse, el asesor histórico de la CGT en materia laboral no se apresura, remarca que sigue trabajando en el boceto y escuchando opiniones. “Soy un tiempista”, grafica el diputado, que sin embargo se tiene fe. “Quiénes votaron en 1957 el artículo 14 bis –se pregunta–. ¿El peronismo? No, nosotros estábamos proscritos, perseguidos, fusilados. Fueron los radicales, comunistas, socialistas y conservadores. Entonces, pienso que ahora, con este proyecto, juntamos a todo el país.” –El titular de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios, Daniel Funes de Rioja, no parece de acuerdo.

–La letra de la Constitución no se puede considerar letra muerta. Nadie puede aceptar eso. Por eso me llama la atención cuando dicen que Funes de Rioja critica este proyecto, porque él fue un constitucionalista.

–¿Cuál fue la primera reacción que obtuvo por parte del empresariado?

–Normalmente, las grandes empresas buscan excusas para defender la rentabilidad. Si hablamos de los convenios colectivos, hablan del desborde, del caos, de los porcentajes de aumento sin referirlos a los ingresos. Pero el cien por ciento de 0 es 0. No se puede aislar el porcentaje de la suma fija. Además, desde diciembre aumentaron mucho los precios, sobre todo los de la canasta alimentaria, y sin que hubiera paritarias. Si pensamos que esto se produjo en vísperas de una negociación colectiva, es casi una provocación.

–¿A qué atribuye estas actitudes de una parte del empresariado?

–La tesis más benigna es que están defendiendo la tasa de rentabilidad, pero hoy creo que hay algo más. Creo que, además, lo que están haciendo algunos sectores, no digo todos, es generar un clima como de desborde, de inestabilidad, y algunos otros, más a la derecha todavía, como dirían los compañeros de Carta Abierta, muestran una “actitud destituyente”.

–¿Qué opina de las críticas del titular de la UIA, Héctor Méndez?

–“Se le soltó la cadena”, dijo Méndez, y me mandó a vivir a Cuba. La descalificación no me preocupa, discutamos el fondo. “Si participan en las ganancias participan en las pérdidas”, me dijo Méndez. Esto se contrapone con dos cosas. Primero, con la normativa, porque el derecho a participar en las ganancias es un derecho constitucional y no hay ninguna norma que obligue a participar en las pérdidas al trabajador. Pero, además, en el derecho del trabajo universal hay una categoría que se llama riesgo de empresa: el empresario que asume una empresa corre con el riesgo.

–También se dijo que esto perjudicaría a las pequeñas compañías.

–En realidad, las va a favorecer, porque cuando el trabajador tiene más capacidad de consumo no se va a veranear al Caribe, sino que consume en el país. ¿Y quién vive del mercado interno? La pequeña empresa, claro.

–Otros sostuvieron que su proyecto va a espantar a los inversores...

–Tengo respuestas para eso, la estamos elaborando. Por ejemplo, que a lo que se reinvierta no se lo considere ganancia y entonces no se tenga que participar.

–¿Cuáles son los antecedentes en que basa su proyecto de ley?

–En el país, todas las empresas públicas privatizadas tienen participación en las ganancias y también hay empresas privadas, como Bridgestone. Están los casos de México, Chile, Brasil, Francia. Pero además, no importa lo que pasa en otros países. En la Argentina hay una norma constitucional, y al que no le guste lo que va a tener que hacer es cambiar la Constitución. 
http://www.elargentino.com/nota-96178-Al-que-no-le-guste-entonces-que-cambie-la-Constitucion.html