19 jul 2010

Anticiparse a los límites y necesidades Por Andrés Tavosnanska

La perspectiva para el segundo semestre es que el país cierre el año creciendo de forma acelerada, aunque seguramente sea a un ritmo más lento que en los meses iniciales de la recuperación. La salida de la crisis tuvo dos motores: por un lado, buena parte del mundo logró salir de la recesión, especialmente países emergentes como Brasil y China, que tienen peso en el comercio exterior argentino.
Por otra parte, Argentina llevó a cabo una política contracíclica de sostenimiento del gasto público, que tuvo como eje a la inversión pública y a la Asignación Universal por Hijo, además de la regulación del comercio exterior (generalizando las licencias no automáticas). A eso se le suma la cosecha récord, el repunte del consumo impulsado por la suba salarial negociada en las paritarias y el dinamismo que va tomando el resto de la economía por el mismo efecto multiplicador. Esto se refleja en la recuperación de la inversión, que tiene su impacto en las importaciones, pero también tracciona la expansión de los productores locales de bienes de capital. De no mediar un empeoramiento en las condiciones externas, probablemente se pueda sostener en el corto plazo este modelo de crecimiento acelerado (aunque menor al del gobierno de Néstor Kirchner), alta inflación, superávit comercial (el cual ya perdió a su gemelo fiscal) y tipo de cambio real apreciándose.

Sin embargo, en el mediano plazo, ya conocemos las consecuencias de usar al tipo de cambio como única política antiinflacionaria. La apreciación puede tener un efecto expansivo inicial, pero de profundizarse terminará afectando la producción y exportación de los bienes con mayor valor agregado.

La caída del tipo de cambio real dejaría a la competitividad de los sectores transables argentinos sin otro sostén, teniendo en cuenta, entre otras cosas, que aún contamos con sistemas tanto financiero como de ciencia y técnica muy alejados de las necesidades productivas del país. Y la restricción externa puede volver a marcar los límites de la economía argentina.

*Economista - AEDA
http://www.elargentino.com/nota-99234-Anticiparse-a-los-limites-y-necesidades.html